Aclaración:
Estas fotos no son mías, son de una de mis fotógrafas preferidas: TAMARA LICHTENSTEIN http://tamaralichtenstein.tumblr.com/.
Se las tomo prestadas porque además de ser bellas, representan perfecto este momento del blog, pero juro que cuando llegue a tener las mías serán remplazadas.
Me dieron ganas de escribir acerca de un tema que esta
presente en todas sus formas en todos nuestros días pero a la hora de
reflexionar sobre el a todos nos cuesta poder definir, ordenar, descubrir ,clasificar.
Es tan relativo que la mejor formar de hacer algún jucio o
dar alguna opinión es siempre dejando claro que va de la mano de la experiencia
de cada uno.
Antes de partir, varios meses antes, decidí tomarme momentos
para pensar donde estaba parada, que me rodeaba, que quería empezar y sobretodo
terminar.
Arrastraba historias que me ataban y sentía que nunca iba a poder concluir. Y pensé
varias veces el viaje como un “cuando este allá me voy a olvidar”. Y no me
pareció mal, porque aunque algunos lo vean como un escape, a veces hay que
entender que si no se cambia de contexto o se respira aire nuevo las emociones
son demasiado difíciles de renovar. Mas cuando el cambio es el mayor miedo a evolucionar. Y esa misma adrenalina de cambio es la que nos hace no querer salir
de lo cómodo o de aquello conocido que no nos disponemos a dejar ir para enfrentarnos a algo nuevo que no
sabemos si va a ser mejor o nos va a volver a lastimar.
Pero en fin, hay cosas que me las lleve en la mochila para
terminar de resolver acá y hay otras que me propuse etiquetarlas, guardarlas o
eliminarlas para poder empezar el viaje bien liviana.
Hablo de cualquier forma de amor: al otro sexo, a un amigo,
a un familiar y para mi la mas importante, a uno mismo.
Un corazón roto, en alguien como yo que piensa piensa y
piensa y no tiene la capacidad de decir basta y olvidar, sino que va en busca
de muchas respuestas, es algo que realmente necesita tiempo para sanar. Pensé
que mis últimos días en buenos aires iba a estar tan excitada con cada detalle del
viaje que no iba a tener ni un segundo para dedicárselo a aquel corazón roto y
a su autor. Pero si, apareció. Y no fue la mas grata experiencia. Despedidas
por acá, despedidas por allá, encuentros con realidades nuevas que cuestan aceptar
pero ninguna solución que encajara perfecta. Así que sin poder hacer mucho al
respecto me traje el problemita en la mochila para sacarlo acá y volver a
analizar. Y me dio un poco de miedo hacerlo viajar conmigo pero afortunadamente
fue la mejor decisión. Empezar de nuevo desde cero, con paisaje nuevo, casa
nueva, circulo nuevo, trabajo nuevo , actividad nueva, nos da la posibilidad de
volver a organizar nuestras prioridades. Y fue ahí cuando en la lista esa
historia quedo en el último lugar. Y he aquí el gran descubrimiento de la
solución: una nueva oportunidad de volver a enamorarnos de nosotros mismos con
una única fórmula…rodearnos de buenas energías. Y con esto no quiero decir que
hay historias que solo se concluyen “yéndonos a la mierda” (quien no dijo esa
frase en alguna época de crisis) sino que no perdamos las esperanzas y
confiemos que a veces no es el momento para dar un paso mas y simplemente hay
que trabajar la posibilidad de “congelar” hasta encontrar el momento justo para
descongelar y cocinar. Pero a no desesperar!
En cuanto a las amistades también hubo que limpiar un poco.
Me resulto muy fuerte escribir “limpiar” pero lo voy a dejar porque así fue
como salió. Este tema disfrute mucho reflexionarlo. Desde hace ya varios años
que tengo el famoso “las del colegio” que son 9 locas lindas, todas completamente diferentes. Esa diferencia empezó a marcarse aun mas hace unos años ya que cuando
teníamos 15 la diversión era decirnos “te re quiero sos mi mejor amiga tenemos
mil cosas en común somos re iguales”.
Bueno no. Ahora no.
Y cuando empiezan a abrirse los diferentes caminos nos da un poco de vértigo, miedo a la perdida, miedo al olvido. Pero cuando todo vuelve a reacomodarse la sensación es divina: es un intercambio de nuevas pasiones que hace que la relación se alimente. Y así me paso estos meses, no solo con las 9 locas, sino que también aparecieron amigos de la infancia, aquellos que pasa el tiempo y pareciera que todo sigue igual. Aparecieron también muchos amigos hombres, cosa que disfruto un montón al ser de familia de puras mujeres.
También están los que desaparecieron, o mejor dicho, los que
hice desaparecer. No por algo esencialmente malo, sino porque cerca me nublaban
un poco el camino. Así que mejor lejos, cada uno por su lado.
Y después nacieron los nuevos amigos, aquellos que con las
pasiones un poco mas marcadas empiezan a formar parte de nuestra propia masa
crítica. Recital por acá, birrita por allá, expo por acá, maría por allá.
Grosos estos amigos!
Y bueno con todo el entorno un poco mas formadito se
empiezan a crear los puentes a KM de distancia. Y ahí es cuando uno se da
cuenta que es lo que realmente lo rodea. En mi caso, miro mis mails, mi
teléfono o cualquier medio de comunicación y siempre están ahí todos los que
quiero que estén, mandándome todo lo mejor de
ellos. Y yo también desde acá por supuesto, para que siempre me sientan cerca.
Creo que cuando uno empieza a sacar las cosas y a ordenarlas
empieza a sentirse de a poco cada vez mas cómodo con uno mismo. Y cuando
aparece el concepto de uno mismo, ya no hay vuelta atrás- Te empezás a dar
cuenta que no hay nada mas lindo que quererte, cuidarte, mimarte. Y como se hace eso? O como lo hago yo? Prestándole
mas atención a los momentos que me hacen sonreír. Esa canción, esa comida, esa
caminata, esa página, ese dibujo. Y una vez que los descubro, los repito…o
busco poder repetirlos la mayor cantidad de veces posibles. Obvio que todo
parece mas fácil estando en Australia lejos de la rutina bonaerense. Pero en Buenos Aires hacía lo mismo. Me subía al tren y si explotaba de gente y de mal humor,
me ponía música. O sacaba el libro. O si tenía que ir a microcentro en un día de
frío o lluvia salía con tiempo y me sentaba a disfrutar de algún buen desayuno
en cualquier café.
Son pequeñas cosas, pero que al acumularlas se hacen grandes
y empiezan a atraer a cosas aún mas grandes. Y así todo de poco se acomoda.
Gran consejo: tomarse un día para actualizar y limpiar itunes e intentar pasar la mayor parte del día acompañado de música. Nunca falla. Si te da fiaca, prende la radio.
Y ahora como sigue el amor en mi vida?
La banda de amigos lejos pero siempre cerca.
La familia siempre bancando.
Yo creciendo. Y descubriendo.
Y que loco es el amor que llega cuando nadie lo llamo! Todavía
es mas loco estando a KM de distancia.
Estos últimos meses ponía de excusa “no me puedo enamorar de
vos porque me estoy enamorando de mi”. Será que ya me enamore de mi? No puedo hablar
mucho de este tema porque aún es una fantasía y bastante irreal. Pero es increíble como cuando
todo se acomoda aparece esa persona que te hace entender porque tuvieron que
pasar tantos salames por tu vida hasta darte cuenta que es lo querés. No se si él es lo que quiero.
Pero solo se que pienso en él todos los días, KM de amor.